JESUS APARICIO GONZALEZ: «LA POESÍA HA SIDO, ES Y SERÁ SIEMPRE, ES INTEMPORAL»
Por: Isabel Rezmo
La palabra es necesaria para el mundo, para el poeta es mucho más. Es su incensario, su plomo, su miga. Necesitamos rescatarla para que el mundo lo entienda. El lenguaje gráfico que rodea el verso es un compendio de múltiples reflejos.La palabra invoca una acción desmedida: desierto y vacío, virtud y conocimiento. Mucha hambre, sencillez.
Nuestra entrevista este mes gira en torno a estos parámetros. Presentamos un poeta, en el sentido más puro y genuino. Jesús Aparicio González (Brihuega, Guadalajara-España) ama la palabra. A través de su poética refleja todo el trabajo que ha dedicado a cuidarla e intentar trasmitirla como un océano de luz, de verdad. Su poesía encierra el enigma, imagen, mística, sosiego, introspección…
Probablemente dejemos mucho más. Pero debemos quedarnos con la verdad que encierra su poesía, una verdad que nace de lo más cotidiano y genuino. El mundo tiene múltiples aristas y Jesús condensa esas aristas en un único y trascendental principio: el verbo, tan real como el aire que respiramos y su meditación es esencial para entender el universo que nos rodea. Un conocimiento a través del diálogo con la parte humana y poética que habita en nosotros, y fuera ante nosotros.
Recientemente, ha publicado su último trabajo: “Sin saber que te espera”, con la editorial Ars Poética, (2019).
Proverso quiere acercar a sus lectores, la figura y la obra de este gran poeta, servidor de la palabra y de la sencillez absoluta.
RP: Buenas tardes Jesús, un placer tu compañía. ¿Cómo definirías la poesía?
JA: Pregunta con la que nos acostamos y levantamos cada día los poetas. Cada uno busca la suya en cada poema. Ya lo cantó perfectamente Bécquer: “Espíritu sin nombre/indefinible esencia……de que es vaso el poeta” Y si hay alguna breve poética con la que me sienta también identificado es esta tan conocida de Miguel de Unamuno: “pensar con el sentimiento y sentir con el pensamiento”, idea y emoción formando un todo indisoluble que alimenta la palabra, palabra precisa y necesaria, que al fin y al cabo es la materia con la que construimos y cantamos los poemas. Y si quieres una de mis poéticas más personales te comparto este poemilla incluido en mi libro “El sueño del león”:
Pañuelo y palabra
dan vuelo a una paloma. Adán fue soplo sobre inerte barro y yo me vuelvo al barro en breve soplo. La vida (y la poesía) al fin se explica desde la magia.
RP: ¿La primera vez que sentiste su llamada: fue conocimiento o revelación?
JA: La poesía entró en mí no por iluminación sino por inmersión. Recuerdo estar en modo poético toda mi vida. Desde que a los tres, cuatro años, escuchaba y cantaba desde el balcón de mi casa natal en Brihuega, las jotas que escuchaba a mi padre y las que yo mismo me inventaba. Pronto dejé de cantar por timidez y me puse a escribir, ocultando lo escrito en principio, publicando bajo sinónimo en mi adolescencia después……. Y hasta hoy, en este tiempo (tan dado al espectáculo) en que me expongo con un cierto temor al desnudo del espíritu en que nos deja la poesía.
RP: En la actualidad con la cantidad de creadores que surgen ¿Dónde radica el éxito en la poesía?
JA: La poesía tiene poco que ver con el “éxito” mundano, con la fama que como humanos perseguimos inútilmente, llevados por el sinsentido de la vanidad. La poesía es el ser irrenunciable que el poeta, que de verdad lo es, lleva dentro. Y con ella va creciendo, recreándose en cada verso, que es siempre esa agua, esa luz que le da vida.
RP: Pessoa afirmaba “Ser poeta no es una ambición mía, es mi manera de estar solo”. ¿Qué significado tiene para ti?
JA: Palabras proféticas de Pessoa. No hay poesía sin soledad, tanto para escribirla como para recrearla leyéndola. Una manera de estar y de ser. Te puedo compartir unos versos que escribí hace apenas dos días:
UN CÍRCULO VIRTUOSO
La soledad nos regala el silencio, el silencio engendra poesía, poesía se goza en soledad.
RP: Actualmente hay un activismo poético o literario exagerado; y en ocasiones la poesía se relega a un ámbito privado minoritario. ¿Dónde crees que radica el equilibrio?
JA: Juan Ramón Jiménez ya nos dijo que dedicaba su poesía “A la inmensa minoría”. A mi modo de ver la Poesía reniega del espectáculo y del circo que en esta sociedad postmoderna estamos montando. Todo ello sirve para su difusión, bien, lo admito. Pero al fin, el verdadero disfrute de la Poesía, se da en el cara a cara con la Palabra, en la soledad del estar con uno mismo.
RP: ¿Crees que la poesía está perdiendo su verdadera identidad?
JA: La poesía ha sido, es y será siempre, es intemporal, trasciende sobre las modas de cada época. Está ahí para quien sabe encontrarla y vivirla, para quien reconoce “ese anillo que sujeta/ el mundo de la forma/ al mundo de la idea” (Bécquer dixit)
RP: ¿Los autores que más te han marcado?
JA: La lectura y relectura de los clásicos españoles han sido siempre un alimento poético en mí. Recuerdo que en mi adolescencia devoraba con insistencia poemas de autores completamente distintos pero esenciales cada uno de ellos: desde León Felipe a Vicente Aleixandre, desde Juan Ramón Jiménez a Blas de Otero, desde Antonio Machado a Luis Cernuda, desde Ángel González a José Ángel Valente…….cada uno es un universo en sí mismos y todos, de alguna manera, han influido en mí.
RP: En tu caso ¿Cómo es el día a día en tu quehacer poético ?
JA: Contemplar, escuchar, prestar atención a todo aquello que nos rodea, por pequeño e insignificante que se nos presente a los sentidos, cada día puede surgir el relámpago de la poesía. “Amor y poesía cada día” nos aconsejaba Juan Ramón. Y dejar sobre el papel “unas pocas palabras verdaderas” que el tiempo decantará y juzgará si pueden ser publicadas.
RP: De todos tus libros ¿cuál es el más representativo o el que más te ha llenado o te ha dejado satisfecho?
JA: No sabría decirte. Todos tienen algo especial para mí: “Con distinta agua” (que ganó el premio de Aranda de Duero) marcó un punto de inflexión en mi obra, pero luego , creo, he crecido como poeta: “Las cuartillas de un náufrago”….. “La paciencia de Sísifo”…. y este último, claro, “Sin saber que te espera”, por ser el más reciente y el que incluye unos poemas finales dedicados a la enfermedad y muerte de mi padre.
RP: ¿Qué va a encontrar el lector en “Sin saber que te Espera”?
JA: Este libro ahonda en la realidad, pensada y sentida desde el corazón de un hombre que se sabe perecedero y por lo tanto semilla de lo que está por nacer. Poemas que han surgido en el devenir cotidiano, donde el temor y la esperanza construyen el aquí y ahora, muchas veces apresado entre las garras del tigre pero siempre bajo ese soplo que mueve y eleva la mirada del águila. Serenidad y gozo de vivir reconocido en las cosas pequeñas.
RP: Muchísimas gracias por tu tiempo.
JA: Muchas gracias a ti por tu dedicación y trabajo (no siempre reconocido), por el alma y la ilusión que pones en sembrar y difundir la Poesía allí por donde vas.